Una habanera, suave y melancólica suena. Al principio entran las guitarras y se van sumando el contrabajo y más adelante el piano… así dulcemente también llega la voz puesta al servicio de las palabras elegidas por la gran poetisa chilena Gabriela Mistral, palabras que hablan de paisajes y que dan vida al silencio que se invoca para que el niño duerma. Una Canción de cuna de su poemario “Ternura” de 1924 nos adentra en la belleza que despliega la poesía de esta mujer de sensibilidad exquisita, a la que otra mujer Sole Giménez se atreve no sólo a cantar si no a musicar con una melodía sencilla y risueña con la que el poema baila, y que seguro hará las delicias de todo aquel que se deje llevar por las cadencias sinuosas que despliega esta canción.