Esa sensación de convicción absoluta, que ha definido el revolucionario trabajo de Morrison a lo largo de casi cincuenta años, recorre todo el nuevo disco, su álbum de estudio número 35 como artista solista. La carrera de Morrison (en la que ha sido galardonado con un premio Brit Award, un OBE, un Ivor Novello, seis Grammys, nombrado doctor honoris causa por las universidades de Belfast Queens y Ulster, entró en el Rock and Roll Hall of Fame y obtuvo la Medalla de Oro Francesa de las Artes y las Letras) ha hecho nada menos que redefinir las posibilidades de la música pop. Las diez canciones originales en Born to Sing, su primer álbum nuevo en cinco años (el tiempo más largo que ha pasado entre grabaciones), revelan a un artista en continua experimentación poniendo a prueba sus parámetros creativos.
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"No son todas de lo mismo", explica. "Algunas tratan sobre la crisis mundial, otras son más místicas. Cualquier idea que surja, no hay un ABC establecido como pauta. En realidad, no sería interesante si todo estuviese ya preestablecido, no habría sorpresas”. Como apunta Morrison, quizás lo que más llama la atención del nuevo álbum es escucharle considerando y sopesando en varias canciones el colapso global internacional financiero y económico. Su indignación hacia el materialismo y la codicia que han envenenado la sociedad aparece ya en el tema que abre el disco, el ligero y dinámico pavoneo soul Open the Door (To Your Heart), cuando canta "El dinero no te hace estar realizado o satisfecho. El dinero sólo es para pagar las facturas".
La temática es recurrente en todo Born to Sing, llegando al culmen en el tema que cierra el disco, Educating Archie(Educando a Archie). El título hace referencia al muñeco de un ventrílocuo en un programa de la radio BBC británica popular cuando Morrison era joven y también al antihéroe de clase trabajadora de la televisión Archie Bunker, representando ambos a ese tipo de gente corriente a quien el cantante advierte: "Eres un esclavo del sistema capitalista que está gobernado por la élite internacional".
Morrison, que nunca fue conocido por ser un cantante protesta, insiste que no está tomando partido políticamente. "No estoy protestando, sólo observo lo que pasa. Como decía Lenny Bruce: ¡Observación, cariño!", declara. "Desde hace un par de años, todo el mundo no hace más que hablar de dinero, dinero, dinero, y así es cómo surgieron las canciones. Sea lo que sea de lo que hable la gente, las ideas que hay a tu alrededor, eso es lo que absorbes y te influye".
La más fascinante podría ser If In Money We Trust, una meditación con duración de canción sobre las maneras en las que el dinero ha reemplazado a Dios en el centro del moderno sistema de creencias. "Esa idea me vino al estar mirando un billete de dólar y darle vueltas al concepto que leía en él", explica. "Pensé, ¿Qué es esto que hay escrito aquí, qué significa? El dios de algunas personas es el dinero, recientemente hemos descubierto que eso es aplicable a mucha gente, así que entonces ¿qué pasa después de eso, qué pasa si no lo tienes, o si no tienes suficiente?".
La canción también sirve como un vínculo al tipo de espiritualidad y misticismo que ha sido central en el trabajo de Morrison desde piezas maestras de sus primeros comienzos como Astral Weeks y St. Dominic's Preview llegando hasta triunfos más recientes como The Healing Game y The Philosopher's Stone. Tras lamentarse cantando Where's God? como estribillo en If In Money We Trust, inmediatamente sigue con el torbellino blues de Pagan Heart , donde le encontramos buscando y lanzando maleficios, y Down by the crossroads / Down by the Arcadian groves. Otras canciones, como Retreat and Viewy Mystic of the East ilustran la constante exploración de Morrison del misterio divino.
"Todas son simplemente ideas", declara sobre las múltiples perspectivas ofrecidas a lo largo de Born to Sing. "No son mis creencias, no estoy haciendo proselitismo, no es ningún tipo de manifiesto. Las canciones son sólo ideas, conceptos, y simplemente se pone el micrófono ahí y se deja que salgan. No hay reglas que digan que no se pueden tener ideas diferentes; de hecho, ¿por qué no? ¿Por qué no tener ideas diferentes?".
Desde sus comienzos, Van Morrison ha canalizado las influencias de gigantes de la talla de Hank Williams, Jimmie Rodgers, Muddy Waters, Mahalia Jackson y Leadbelly. Su música ha definido barreras, ofreciendo de todo, desde el soul-jazz marchoso de Moondance hasta los estilos célticos tradicionales de Irish Heartbeat. En las últimas décadas, ha colaborado con una amplia gama de artistas incluyendo a John Lee Hooker, Mose Allison y Tom Jones, y ha dedicado proyectos a celebrar y reexplorar sus raíces blues, jazz, skiffle y country.
Born to Sing, grabado en directo en el estudio con una banda central de seis miembros (además de Morrison al piano, guitarra y saxofón alto), prolonga estas raíces musicales hasta convertirlas en una fusión característica que es imposible de imitar o de clasificar. Una canción, la tonadilla Close Enough for Jazz, empezó siendo un tema instrumental, antes de que Morrison decidiese después añadir letras. "No pienso en términos de etiquetas", explica. "Es una mezcla de todo eso, una amalgama de toda la música y todas mis influencias, y esperas que derive en forma de algo nuevo. Ray Charles ha sido siempre mi modelo a seguir. Hizo de todo, incluyendo el reinventar la música country".
Este álbum marca también el regreso de Morrison al sello Blue Note, hogar de muchos de sus ídolos de jazz, para el que grabó por última vez What's Wrong With This Picture?de 2003. El cantante declara que la filiación es importante para él. "Mi padre tenía unos cuantos discos del sello Blue Note", cuenta, "y uno de los primeros discos que tuve fue el Summertimede Sidney Bechet, que también estaba en Blue Note".
A pesar del título del álbum, Morrison declara que en realidad no supo de inmediato que había nacido para cantar (Born to Sing). "No sabía que iba a convertirse en un trabajo hasta que tuve quince o dieciséis años y empecé a trabajar en bandas", cuenta. "Era simplemente un chaval intentando abrirme mi camino en la vida. No hubo una revelación, no funciona así". Desde entonces, Van Morrison ha ofrecido una revelación sin descanso a los fans en todo el mundo. Con Born to Sing, responde a un tiempo de crisis con consuelo y perspicacia, visión y asombro, e incomparable alma que muestra lo que pasa cuando realmente se crea desde el corazón, sin ningún Plan B.
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