Esa inquietud hace que no se limite a escribir para otros, sino que lleva años haciéndolo para sí mismo; últimamente reparte su cosecha entre los nuevos discos de Loquillo y un creciente repertorio que va interpretando en acústico o con banda. Los temas han ido creciendo, madurando y siendo tocados cada vez con más convicción, hasta que es una verdadera pena dejarlos sin que pasen de la fase maquetera, más privada que otra cosa.
Igor sigue y seguirá con Loco, de modo que ha necesitado meses para llevar a buen puerto esta grabación y será un esfuerzo compaginar dos giras simultáneas; pero está tan convencido de lo que tiene para mostrarnos, que es capaz de cualquier cosa. "Equilibrio inestable" es una obra necesaria porque da salida a una porción de sentimientos verdaderos de su autor, un tío que pone su nombre y su foto en la portada para que no queden dudas.
Uno de los títulos que barajó para este álbum fue "bipolar", palabra que da título a uno de sus temas y que expresa no sólo la doble militancia de quien firma toda la obra, sino también la multiplicidad de sonidos del disco, que van del tono rockero más clásico, que se puede encontrar en "Música para traicionar" o "Chica de gama alta", al blues arriesgado de temas como "Automedicación" y "Mis amigos", pasando por el country más pop en "Bebemos" o "Volver".
Las letras también juegan a la bipolaridad, oscilando entre el exhibicionismo hedonista y el intimismo. Aquí tenemos la extroversión desinhibida de "El peor novio del mundo" o "Automedicación", conviviendo en armonía con la introspección sincera de "Mis amigos" o la honestidad autobiográfica de "La Bahía".o "El corazón del hielo".
El "Equilibrio Inestable" de Igor Paskual llegará el 8 de marzo a las mejores tiendas.
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