NUEVOS CAPITULOS DE LA NOVELA ESCRITA
POR VICENTE RAMIREZ LUCAS
"MIEDO AL AMOR"
Lucky ladraba y
no hacía caso a Lucia, ella no le daba importancia porque el perrito era muy
travieso.
Lucky intuía algo
de lo que se avecinaba.
(Ella) ¿Qué te
pasa Lucky? el perro estaba nervioso, no se fiaba, su sentido le decía que algo
iba a pasar; Lucky empezó a ladrar con dirección al jardín.
Ella empezó a
sospechar al ver que Lucky ladraba a la
puerta de la casa, por lo que cerró toda
la vivienda y puso las alarmas de la finca.
La noche era muy
fría y lluviosa. De repente, una furgoneta aparcó en la puerta trasera de la
casa y bajaron unos individuos provistos de pasamontañas y malas ideas.
La intención de
la banda era anular las alarmas y se dispusieron a cortar los cables.
En el interior de la casa, Lucia aseguró bien
las puertas y se acostó.
De nuevo, los gruñidos
de Lucky hicieron que Lucia se levantara y encendiera una luz potente que
iluminó la entrada de la casa.
La banda cortó
los cables de las alarmas y entraron por una ventana con artilugios muy
sofisticados.
Los atracadores
se dispusieron a robar todo lo que encontraban en su camino, que era mucho,
porque la modelo era una amante de las obras de arte. Ella, asustada en su
habitación con su perrito y gatito, esperaba acontecimientos.
Su intención
inmediata era llamar a la policía, pero no iba el teléfono y habían anulado la
cobertura del móvil con un inhibidor.
Le tiraron la
puerta abajo
(Ella) Por favor,
llévense lo que quieran, pero no nos hagan nada.
El jefe de la
banda, al ver tan elegante y atractiva mujer, joven, guapa y esbelta, le dijo:
Desnúdese, que la
quiero ver.
(Ella) Por favor,
¿qué quiere de mi? llévese lo que quiera, en la caja fuerte tengo dinero, pero
no nos hagan daño.
(El)El, al verla
tan bella y atractiva, le dijo: Me apetece
acostarme con una mujer como usted y hacer el amor.
(Ella)No,¡ por
favor!.
(El) No me
obligue a hacerlo por la fuerza, me gustaría su complacencia si no quiere que
sus animalitos sufran más de la cuenta.
(El) Cogió al
gatito y le dijo:¿ quiere despedirse de él ?
Ella, ante la
situación que estaba viviendo y sufriendo por sus animalitos, accedió.
(El) Vamos a follar
que tengo hambre.
El se volvía loco
ante un cuerpo tan esculturar y consumió
la violación.
Ella hacía gestos
de llorar y rabia, mientras él disfrutaba con una mujer de singulares
características, una modelo de alto standing.
(El) No le vamos
a hacer daño por haber accedido a follar conmigo.
Ella tampoco
opuso mucha resistencia ante esa clase de individuos, con el fin de evitar el
menos daño posible y que se marcharan.
Juan llamó, como
ella le pidió, pero no le daba señal el teléfono.
Pensaba, ¡qué
raro! Ni el fijo ni el móvil.
Juan arregló a su
madre, que estaba inválida, la dejó
acostada y le dijo: Mamá, ahora vengo, voy
a un recado, no tardaré.
Juan salio hacia
la finca, temía que algo podía pasar; se
fue a toda velocidad y cuando llegó lo vió todo a oscuras. Juan llevaba en el
coche una potente linterna de las obras, que le sirvió de guía para ir en busca
de Lucia.
CONTINUARÁ……………………….
Quinto CAPITULO
Juan llegó hasta
la habitación y la encontró inconsciente, desnuda en el parquet y le dijo: (EL) Por Dios, Lucia ¿qué ha pasado?
¡Despierta!. El le hizo el boca a boca y ella se espabiló
(Ella)Juan, ha
sido muy fuerte, nos han atracado. Mira lo que me han hecho:
¡Me han violado!
(Ella)Se abalanzó
llorando ante Juan .Por favor, ayúdame,que no puedo con mi alma.
Ella estaba tal
como la dejaron, desnuda. Juan la cogió en brazos, la trasladó a la cama, la vistió como pudo y se la llevó al Hospital.
En el Hospital
tuvo que quedarse ingresada, debido a su lamentable estado.
Juan se quedó en
la sala de espera. Salió el médico y le dijo: ¿esta joven es algo de usted?
El se quedó pensativo y no sabía que
decirle al médico. Perdone, sí es una amiga.
El médico le
preguntó: ¿qué le ha pasado? Juan le contó lo sucedido y el médico dijo: ¿ha
llamado a la policía? Juan le respondió: No, lo primero que he hecho es traerla
al Hospital.
El médico y Juan
llamaron a la policía que inmediatamente se personó en el Hospital. Le hicieron
una especie de interrogatorio a Juan. ¿Quién es usted? ¿De qué la conoce?
¿Dónde estaba usted? Juan: Sres., que parece que sea yo el culpable.
El policía: Perdone,
pero es nuestro deber; acompáñenos a la casa. Los dos policías y Juan se
dirigieron a la casa para ver lo sucedido.
La policía
requirió los servicios de los compañeros de científica, tomaron huellas y
fotografías de lo sucedido.
Una vez terminó
la policía, acercaron a Juan al Hospital.
El médico le dijo
que tenía que quedar ingresada. Habia perdido mucha sangre y estaba grave. Juan
se asustó. Ella estaba sedada, dormida y Juan permanecía a su lado, cogidito de
su mano. Ella medio se despertó y se
llevó una gran alegría cuando se dió cuenta que era él. Le dijo: ¿eres tú
cariño? El le respondió: Sí,Lucia ¿cómo te encuentras? Mal, pero teniéndote a ti
cerca, bien.
(El)Lucia, ¿sabes
que te tienes que quedar ingresada? Estás muy malita.
(Ella) Sí, cielo.
(El) No te
preocupes que voy a estar contigo, con mi madre ya me lo arreglaré como pueda.
(Ella) Juan me
sabe mal donde te he metido, lo feliz que estarías con tu madre.
(El) Ahora
también soy feliz a tu lado, Lucia.
(Ella) Le cojió
la mano y con lágrimas en los ojos le dijo: Juan, ¡te quiero!
(El) Le respondió:
Lucia, nos queremos, pero ahora lo que
nos importa es que te pongas fuerte y salgamos de aquí.
(Ella) Sí, mi
amor.
(El) Le dió la
merienda. Ella no tenía ganas de comer pero Juan, a la fuerza, le hizo comer.
Ella se sentía tan enamorada de Juan que
cada vez que él le acercaba la comida a
la boca, no podía resistirse.
(El) Lucy, me
marcho. Luego me paso a la hora de la cena.
(Ella) ¿Dónde vas
mi amor?
(El) Voy a ver a mamá,
a darle la cena y me vengo a estar
contigo.
(Ella) ¿Me vas a
querer dar un beso, o sigues teniendo miedo al amor?
(El) Acercándose
a ella le dió un beso en la frente.
(Ella) Juan, ven
aquí y siéntete muy hombre. Ella le cojió de la mano y se lo recostó sobre su
cama para darle un beso apasionado. El, medio asustado: ¿Qué haces Lucia?
Los dos
enroscaron sus bocas.
Ese fue, sin duda,
el primer gran beso que se dieron los dos. Estaban conmocionados, las
sensaciones de aquel momento eran muy difíciles de explicar: sólo ellos lo
sabían.
Sexto CAPITULO
Los dos se
quedaron en éxtasis, se miraron a los ojos fijamente y Lucia le dijo:
(Ella)¿Qué te ha
parecido, cariño?
(El) Eres muy
mala, me marcho, hasta luego, mua.
(Ella) Mua, ¿no
quieres otro?
(El) Me marcho,
adiós.
Juan se sentía
otra persona, era la primera vez que una
mujer le besaba de esa manera.
Lucia, sola en la
habitación 115 del Hospital Primero de Mayo, piso 5, pensaba: ¡Que chico!,
cuanto lo quiero, con esa carita y tan virgen, estoy loquita por él.
Ella recibió la
visita del médico de guardia, un joven Doctor guapo y atractivo que la saludó.
(Dr.) ¡Que tal!
¿Cómo se encuentra, Lucia?
Acostumbrada a su
médico, Dr. Peláez, ya de cierta edad, que la trataba desde el primer día, quedó sorprendida al
recibir la visita del joven médico Dr. Ricardo.
Todos estaban
impresionados por la belleza, el físico que poseía la joven modelo, llamaba la
atención hasta acostada.
(Ella) Mejor, usted¿quién
es?
(Dr.) Lucia, soy
tu médico de guardia.
(Ella) Estoy un
poco mejor, pero bastante floja.
(Dr.) Vamos a ver,
que te osculte y te dé un vistazo.
(Ella) Sí, Dr.
Ella se subió la
camisa del pijama.
(Dr.) La oscultó,
quedando extasiado ante tan escultural cuerpo.El Dr. le preguntó: ¿de qué
trabajas, Lucia?
(Ella) Soy modelo
profesional.
(Dr.) Se te nota,
eres y estás muy bella. ¿Qué te pasó?
(Ella)Dr.,
perdone, pero fué tan desagradable que no quisiera recordarlo.
(Dr.) ¿Vives con
alguien?
(Ella) No y sí. Hay
una persona que ha entrado en mi vida de una forma muy especial, le tengo un
amor personal.
(Dr.) Muy bien,
Lucia. Si te parece voy a hacer unas visitas, luego paso a estar un ratito
contigo y te miro como estás de tensión y fiebre.
(Ella) Gracias,
Dr.
El Dr. quedó como
todos, enloquecido por tan linda y atractiva mujer y pensaba: Menudo monumento,
qué medidas.
Al cabo de un
rato, de nuevo el Dr. llamó a la puerta de la habitación 115 y preguntó:
¿Se puede?
(Ella) Adelante,
Dr.
(Dr.) Llámame
Ricardo. A ver el termómetro (que estaba
sobre la mesita). Tienes unas décimas, veamos los puntos.
(Ella)Se bajó el
pijama y el Dr. inspeccionó la herida
(Dr.) ¡Qué salvajes,vaya
gentuza, comó llevas esto!
El Dr. la miró con mucho cariño y la tocó. ¿Te
duele?,
(Ella) Un poquito
(Dr.) Voy a llamar
a la enfermera para que te cure.
El Dr. la atendía
como si fuera algo de ella. Le estaban pasando muchas cosas por la mente, era
tal mujer que a todos les pasaba lo
mismo, se quedaban hipnotizados.
Ese fué uno de
los motivos por los que Lucia comprara la finca y quisiera vivir aislada de
todo el mundo, sobre todo de los hombres, porque despertaba grandes deseos
en ellos y no la
dejaban vivir de tanto acoso. O como piensa ella: todos menos uno, Juan.
Séptimo CAPITULO
Vino la
enfermera, la curó y se quedó dormida.
Luego llegó el
Dr. y se sentó junto a ella mientras dormía.
Ella, medio
dormida, extendió la mano hacia el sillón y apretandolé la mano al Doctor dijo:
¿Ya estás aquí, cariño?
En ese momento se
abrió la puerta de la
Habitación 115 y entró
Juan.
(J)¿Esto qué es?
(Ella) Juan,
cariño, no pasa nada, te explico.
(Ella) Es el Dr.
que ha querido estar un ratito haciéndome compañía y estaba dormida, me desperté
en sueños y le cogí la mano creyendo que era la tuya.
(A Juan no le
gustó lo que estaba viendo).
(Dr.)Perdone,
solo deseaba acompañarla, nada más.Me marcho.
(Juan estaba
enfadado)¿Esto qué es, Lucia? Entro y te
veo cogida de la mano del Dr. Nada más faltaba que os hubiera visto besándoos.
(Ella) Cariño,
¿estás celoso, mi amor?
(El) Lucia, ¿tú qué
crees?
(Ella)Cojió a
Juan, se lo recostó sobre ella y le dijo: ¡Te quiero!
En ese momento le
trajeron la cena y Juan se disponía a dársela: un hervidito, merluza y un
plátano.
Juan levantó la cama, le puso la bandeja delante y
le dió poco a poco la cena. Ella tenía apetito.
(Ella) Juan, ¿me
ayudarás a comérme el plátano?
(J) Cogió el
plátano y pelándolo motivó las risas de ella.
(Ella)¡Qué
hermoso! ¿es como el tuyo?…
(J) Algún día lo
sabrás.
(Ella, entre
risas) ¿No tardarás mucho, verdad?
(El) Lucia,
Lucia.
(Ella) Celosin
¿estás mejor?
(J)¿Tú qué crees?
Ven, dame un beso, mi amor.
(J) La besó
apasionadamente.
(Ella)¿Y mamá,
como está?
(J) Bien, la dejé
arregladita, le di la cena como a tí, le conté lo nuestro pero le he dicho que
no se preocupe, que no hay nada, sólo amigos.
(Ella)
Sólo amigos ¿de verdad?
(J) Calla, tonta.
(Ella) ¿Te vas a
quedar por si viene el Dr?
(J)¿Quieres que
me quede o me marcho?
(Ella) ¿Te digo
lo que quiero?
(Ella) Acuéstate
aquí, te dejo un ladito ¿te atreves?
(J)¡Estás loca!
(Ella) Por ti.
(J) Se quedó
dormido en un confortable sillón, cogidito de la mano de Lucia.
Ella dormía plácidamente
junto a Juan.
Sobre las cuatro
de la madrugada se abrió la puerta de la habitación 115. Era el Dr. Ricardo que
venía a dar un vistazo para ver como se encontraba Lucia, pensando que estaba
sola, los encontró a los dos cogiditos de la mano y dormidos.
(Dr.) Los despertó
y le dijo a Lucia que se pusiera el termómetro y a Juan le ordenó que saliera
fuera.
(A Juan se lo
llevaban los demonios).
(J) Este tío me
tiene mosca.
Octavo CAPITULO
(Dr.) Lucia,
tienes mucha fiebre, voy a tener que llevarte al quirófano para verte mejor por
dentro.
El Doctor salió
fuera al pasillo, donde estaba Juan, y le dijo: ¿usted, qué es de ella?
A Juan, lo primero
que se le ocurrió, fué decirle: Su novio.
Mire, nos la
vamos a llevar a la UCI ,
para tenerla mejor vigilada.
El doctor no
esperaba que le dijera novio, y convulso le comentó a Lucia: tu novio ya sabe
que te vamos a llevar a la UCI.
(L) Se dijo para
ella: ¿qué le habrá dicho, que soy su novia? ¡Qué alegría!
El Doctor se
había enamorado ciegamente de Lucia y quería tenerla controlada cerca de él.
Vinieron a llevársela
a la UCI , Juan la
acompañó, cogiditos de la mano. Ella le decía: Juan, no te vayas, no me dejes.
(El) Cariño, no
te preocupes.
(Dr.)Usted no
puede estar con ella en la UCI.
(El Doctor entró
con Lucia en la UCI)
(Dr.) Lucia,
perdone lo que le voy a decir: Me he enamorado de usted, me ha trastornado,
desde que la ví y la ausculté no he dejado de pensar en usted.
(Ella) Por favor
Doctor:No, que yo solo tengo a Juan, que lo es todo para mí y no puedo querer a nadie más.
(Dr.) Lo siento,
Lucia, la quiero para mí.
El Doctor le dió
una pastilla y la sedó.
Juan, mientras
tanto, yacía en la habitación 115, pensativo y preocupado por la situación de
Lucia. ¡Qué extraño! yo no noté que tuviera fiebre, si se encontraba bastante
bien.
El doctor deseaba
verla otra vez desnuda y la destapó, mientras ella dormía sedada la contemplaba
hipnotizado, contra más la miraba, más le gustaba.
El Doctor la
trasladó a un Box que había junto a la UCI, tenía deseos de besarla y poseerla.
Juan seguía
nervioso, abandonó la habitación y, como si supiera que algo estaba pasando,
salió en su busca. Intentó meterse en la
UCI, vistiéndose con un batín verde que se encontró colgado en una percha, lo logró
y vio que en la sala no estaba ,le preguntó a una enfermera: Por favor¿ la paciente Lucia?. Creo que está con el Dr. Ricardo, en el Box.Juan entró
en el Box y se encontró a Lucia dormida y al Doctor abusando de ella. Juan lo cogió y le dijo de todo. Le dió un empujón
que lo tiró contra la pared y, sin
pensárselo, llamó a la policía.
Acudió la policía
y se lo llevaron a comisaría.El joven Doctor tenía antecedentes por abusos
sexuales y acosos contra su ex novia y otras
mujeres. En el Hospital le abrieron un
expediente.
Juan pidió que
volvieran a llevar a Lucia a la habitación.
La dirección del
Hospital les pidió disculpas.
(Una vez en la
habitación los dos)
(Ella) Cariño,
cuantos trastornos te causo, ¿porqué te
cruzaste en mi camino?
(El)Lucia, era
nuestro destino el que nos juntó a los dos.
(Ella) Juan ¡Te
Quiero, te Quiero!
(El) Si, cariño,
pero ten calma, vamos muy deprisa, esto se nos escapa de las manos. Me sabe mal
que te quedes sola, con ese cuerpo y con tu belleza, enamoras a cualquiera.
Estaba
amaneciendo en el Hospital Primero de Mayo, Habitación 115. Juan se disponía a
marcharse a su casa, para ver cómo había pasado la noche su madre.
(El) Lucí, me voy
a marchar a ver a mamá.
Noveno CAPITULO
Vendré lo antes
posible para hablar con el médico que te atiende, Dr. Peláez, a ver si te dan
el alta y nos vamos a casa.
Juan había pedido unos días de permiso por su madre,
pero más que nada eran por Lucia, él se lo hizo saber.
(Ella) Gracias mi
amor, nunca olvidaré lo que estás haciendo por mí, cariño esto se llama amor.
(El) Un beso, que
me voy.
(Ella) Cuando él
se acercó a darle un beso, ella lo abrazó con pasión.
(El) Lucia, Por
favor, no empecemos.
(Ella) Siento
mucho por tí, no puedo controlarme, me muero por tí.
(El) A mi me pasa
lo mismo, pero el miedo me puede.
Juan salió de la
habitación del Hospital y se fué en busca de su madre, que se hallaba acostada
en su cama.
(J) Mamá, ya
estoy aquí, ¿cómo has pasado la noche?
(M) Muy mal hijo,
no me encuentro nada bien, estoy muy preocupada.
La madre de Juan,
la Sra. Juana, se interesó enseguida por Lucia, preguntando por ella.
(M) Juan ¿Cómo ha
pasado la noche Lucia?
(J) Bien, mamá.
Juan no le contó
los incidentes acontecidos en el hospital con el consabido Dr. Ricardo, no
quería preocupar a su madre.
Juan la aseó y la
dejó en su sillita de ruedas.
De repente, a la Sr. Juana se le ocurre
decirle a su hijo Juan, llévame a ver a
Lucia al Hospital.
(J) Mamá, tú no estás
para esos jaleos.
(M) Sí, hijo,
quiero conocer a la mujer de tu vida.
(J) Mamá, todavía
no hay nada, sólo somos amigos y punto.
(M) Venga,
arréglame y llévame, hijo.
(J) Está bien
mamá, pero es muy pesado para ti ,ya lo veras.
Juan arregló a su madre y salieron los dos hacia el
Hospital, a ver a Lucia.
La Sra. Juana, a
pesar de su delicada salud, era una mujer muy fuerte de ánimos; ella le ocultaba a su hijo que había tenido una
recaída en sus distintas patologías y estaba grave, y con previsión de que algo
le pudiese ocurrir, deseaba conocer a la mujer de su hijo, de la que tanto y
bien le hablaba, por lo que ambos marcharon hacia el hospital Primero de Mayo,
habitación 115.
Llegaron al
Hospital.Juan entró primero a la
Habitación.
(Ella)Juan, cariño
¿ya estás aquí?
(J) Sí, mi vida,
te traigo una sorpresa.
(Ella)¿De qué se
trata, mi amor?
Juan salió de la
habitación y cogió la silla de ruedas que portaba a su mamá, junto a un ramo de
flores, y entraron a la habitación.
(Lucia exclamó
con naturalidad y con mucho sentimiento) ¡Eres tú, mamá!
(M) Sí, hija, ahora
comprendo a mi hijo porqué está tan enamorado de tí, aunque él cree que no se
lo noto, porque lo sabe llevar muy bien, eres muy bella.
(L) Pero,¿ porqué
ha tenido que venir a verme?Yo iré cuando salga de aquí .Juan me habla mucho de
usted y le he tomado mucho cariño, y ahora que la conozco aun más.
(M) ¿Cómo estas?
(L) Estoy mejor
Sra. Juana, en dos días me dan el alta y
usted ¿cómo se encuentra?
(M) Yo mal, hija,
he tenido una recaída. Juan no lo sabe.
(J) Pero, mamá ¿a
qué te refieres?
Decimo CAPITULO
(M) La Sra. Juana les dijo
hijos, llevarme a una residencia, soy un
trasto para vosotros, necesitáis estar mucho tiempo juntos, consolidando
vuestro amor.
(L) Mama yo no lo
voy a permitir ustedes se van a venir a vivir a la finca.
(J)Mama que
dices, de llevarte aúna residencia, tu
residencia esta junto a nosotros, para los dos tu eres primero, antes que
nuestro amor, así lo tenemos hablado desde un principio.
Lucia se empeño
en que se fueran a vivir a la finca, pidiéndoselo encarecidamente a ambos, después de pros y
contras la Sra. Juana
pensando en la felicidad de ambos, accedió a la petición de Lucia
(L) Le digo mama
yo te cuidare, no tengo mamá y la echo de menos, mi mama murió siendo yo muy
pequeñita y te necesito.
(M) Pero hija
mira como estoy, tu no te mereces esto tan joven tan bella, cargar con migo.
(L) Mama, eres la
madre de mi futuro esposo, y eres mía, por favor mama no te niegues venirte a
casa.
Después de una
larga conversación entre los tres, aceptaron ir a vivir a la finca.
Juan se fue a
llevar a su madre a casa y una vez allí
Juan le dijo a su madre ¿que te parece Lucia mama?
(M) me ha gustado
mucho hijo, ante todo muy guapa, con un
gran corazón y que te quiere mucho, hijo que es lo principal esta muy enamorada
de ti y es lo que quiere una madre.
(J) Gracias mama,
es lo que esperaba oír de ti, te quiero.
Juan dejo a su
madre en casa la dejo arreglada y volvió al hospital.
(J) ¿Se puede?
(L) Adelante,
cariño.
(J) ¿Que te
pareció mama?
(L) Muy buena,
igual que tú, vamos a ser muy buenas amigas ya lo veras.
(J) ¿Como nos
vamos arreglar?
(L) No te
preocupes, tú a tu trabajo y yo al mío, mama.
Juan no sabía cómo
agradecerle todo lo que esta oyendo de labios de Lucia
Juan le iba a dar
un beso en la frente y ella no le dejo, le dijo de eso nada, lo cogio y se lo
enrosco en su boca. Y vinieron las emociones, sudores y temblores se quedaron
Atontaditos. No
sabían que decirse era mucho lo experimentado en ese beso.
A Lucia la iban a
dar el alta a la mañana siguiente.
Juan fue a recogerla al Hospital para llevarla a la finca.
(L)¿Juan me
ayudas a vestirme?
A Juan no le
parecía bien tenerla que vestir, pero no
hubo mas remedio.
Juan accedió a
vestirla,
(L)¿Cariño que te
da corte? voy a ser tu mujer algún día somos, uno.
(J) Si pero esto
para mi es muy violento ahora somos amigos.
(L) Calla tonto,
ahora llamare a otro hombre que me ayude.
(L) Ven, ves a mi
armario y tráeme la ropa, sujetador, camiseta y falda, y chaquetón.
Juan se disponía
ayudar a vestirse a Lucia.
(L) le dice
quieres que me cambie en el servicio o
aquí
(J) le dice en el
servicio
(L) no quieres
verme
(J) cariño si
pero….
Undécimo CAPITULo (11)
Lucia estaba algo
floja de tantos días en el Hospital y lo malita que había estado, se sentía
algo indispuesta y Juan no tuvo más
remedio que vestirla.
(L) Cariño, voy a
sentarme en la cama, trae el sujetador, porfa.
Juan se disponía
a ponerle el sujetador. Cuando Juan la vio, exclamó:Lucia ,estoy impresionado
por tu cuerpo, ¡que senos tienes más bien puestos!
(L) ¿Quieres
tocarlos? son tuyos.
Lucia le cogió la
mano y se la puso encima de ellos, pero él se resistió, abrumado por sus miedos,
aunque al final le abrochó el sujetador.
Lucia le dijo:
tráeme las braguitas, que están en el
cajón.
Lucia se disponía
a cambiarse de bragas, ante la mirada desorientada de Juan.
(L) Ayúdame, Juan.
Juan no quería mirar,
porque se sentía raro, pero ella posó
desnuda ante él.
Juan: Mírame,
cariño, no pienses nada más, te comprendo y solo quiero que me veas; soy tuya,
ya te pertenezco, no temas que no va a pasar nada, soló contémplame.
Juan la miró y no
tenía palabras ante lo que sus ojos estaban viendo.
Los dos se
abrazaron y se besaron, se dejaron llevar por sus impulsos ante tal situación.
(J)Lucia, tenemos
que controlarnos, parecemos niños.
(L) Cariño: ¡Qué
somos sino un niño y una niña que se aman con miedo!
Por fin, Juan
vistió a Lucia. Esta se encontraba bastante floja y se tuvo que coger a Juan.
(Lucia pasó al
servicio)
Juan, mientras,
recogía los enseres de la habitación 115
del Hospital.
Lucia tenía la puerta del servicio un poco
abierta y entonces llegó la enfermera.
(E) Buenas: esta
es el alta de su esposa Lucia.
Juan fue a
corregir a la enfermera, pero algo pasó por su mente.
(J) Mire,
señorita…
Juan iba a
decirle que no era su esposa de momento, pero
no pudo.
(J) Si, perdón,
dígame.
(E) Aquí tiene el
alta de su señora, cuídela que es muy guapa.
(J) ¿Tenemos que volver?
(E) Si, aquí se
lo indico: dentro de dos meses.
(J) Gracias por
todo, señorita.
En eso que salía
Lucia, y la enfermera le dice:
(E) Mire, le he
dejado todo a su esposo, cuídese.
Lucia estaba muy
contenta por lo que estaba oyendo.
(L) Muy bien, si mi
esposo lo tiene todo, gracias.
Lucia se lo
pasaba en grande con el cachondeo del esposo y la señora.
Ambos abandonaron
el Hospital Primero de Mayo y salieron con dirección a la finca.
Ella se sentía
muy feliz por tener a Juan a su lado.
Lucia, cogiéndolo
de la mano, le dijo:Juan ¡te quiero!
Los dos, muy
felices, llegaron a la finca, que se
encontraba algo abandonada ante la ausencia de Lucia.
(L) Cariño, por
fin en casa, ¡que ganas tenia!
Nene, ves preparándolo
todo para traer a mamá.
(J) Si, Lucia, lo
antes posible, porque las dos estáis para cuidaros.
Juan
la llevó a casa y tuvo que ayudarla a bajar del coche, porque ella estaba muy
débil.
(J) Voy a tener
que adelantar la llegada de mamá a la finca, porque no podéis estar solas,
necesitáis cuidados.
(L) Si, cariño,
ve a por ella.
Juan acostó a
Lucia; mientras lo hacía, ella seguía con el cachondeo.
(L)Juan ¿me
ayudas a denudarme?
Duodécimo CAPITULo (12)
(J) bien, cariño,
pero esto no es así, somos amigos, nos estamos pasando.
(L) ¡Ah, yo creía
que éramos esposos!
(J) Eso decía la
enfermera.
(L) ¡Que tontito
te pones!
De
nuevo, Lucia se desnudó para cambiarse de ropa y ponerse el pijama delante deJuan.
Juan miraba para
otro lado, pero ante tal escultura no podía resistirlo.
(L) Si no hacemos
nada malo cariño, esto es muy normal, tú y yo, ahora, somos como hermanos.
(J) Me está dando,
todo esto, mucho miedo.
(L) Pero, Juan,
si tú y yo, por desgracia, no quieres que nos acostemos juntos todavía, aunque
yo a veces lo deseo, porque te siento mío, mi amor.
(J) Luego
hablaremos de esto.
(L) Está bien,
miedoso.
Juan acostó a
Lucia y se fué a por su madre, para traerla a la finca.
(J) Mamá, ya
estoy aquí. Te voy a preparar lo necesario y ya vendré con un camión para hacer
el traslado.
(M) Muy bien,
hijo ¿Cómo está Lucia?
(J) Bien, mamá,
la he dejado acostada.
Juan cogió lo imprescindible
de su madre y de él y salieron para la finca.
Llegaron a la
finca,y lo primero que hizo Juan fué bajar a su madre y subirla a la casa.
(J) Lucia, ya
hemos llegado.
(L) ¡Que alegría
me dais!
Lucia se levantó
de la cama; se sentía algo más fuerte y les acompañó a sus habitaciones.
Lucia, dada la
situación de mamá, quiso que todos vivieran en la planta baja.
(L)Mira, mamá
dormirá aquí, hay otra camita por si necesitas estar con ella, Juan.
(L) Tú, Juan,
aquí en la habitación, al ladito de mamá; yo estoy enfrente, estamos muy cerquita todos.
Una vez todos aposentados
en sus habitaciones y, ante la situación de la madre de Juan, Lucia, había pensado lo siguiente: Voy a tener
que buscar una asistenta que nos ayude.
Lucia pensó en
una amiga, ex compañera, una modelo que estaba sin trabajo, Mireia, que podía
encargarse de cuidarlas.
Cuando estaban todos
en el salón, Lucia comentó el tema.
(L) Mamá, Juan,
he pensado en decírselo a una buena amiga mía, que está sin faena y es muy de
casa, hablaré con Mireia a ver qué me
dice.
(M)¡Cuanto
trastorno te estamos ocasionando, hija!
(L) Mamá, ¿Y lo
que Juan está haciendo por mi? No tiene nombre, se comporta como un esposo.
(J) Lucia, nos
hubiéramos apañado de cualquier manera.
(L)Tranquilo, mi
amor.
Lucia llamó a
Mireia. Le contó todo y ella le dijo que sí, que ahora era un buen momento
porque no había casi trabajo y que por la mañana hablaria con ella.
Al dia siguiente,
a primera hora, se presentó en la finca Mireia, una joven tan atractiva como Lucia.
Mireia llamó al
timbre.
(J) Juan abrió la
puerta.
(Mi)Hola, tú
serás Juan.
(J) Sí, tú debes
ser Mireia.
(J) Pasa, ahí está
Lucia. (Juan,cuando la vió, tan monumental, elegante y despampánate, la comparó
con Lucia, ya que eran muy iguales)
Mirella y Lucia
se abrazaron porque eran muy buenas amigas.
CAPITULo
DECIMO TERCERO (13)
Lucia le explic ó todo:
(L) Mira, esta es
mamá, la pobrecita ya ves como está; ella es la madre de Juan y ahora también
mía. Este es Juan, bueno, no sé todavía
como presentártelo, si como mi esposo,
novio, marido, hermano, amante, aunque
mejor es todo a la vez.
Lucia se acercó a
Juan y le cogió por la cintura diciéndole:
(L)¿Qué somos, mi
amor?
(J) Muy buenos
amigos.
A Mireia le
extrañó que Juan dijera amigos.
Mireia enseguida
se familiarizó con todos, ya que era una chica encantadora.
Lucia era muy
feliz al ver que Juan se había venido a vivir a la finca y así tenerlo tan
cerca, igual que a mamá.
Las noches
pasaban muy tranquilas; después de cenar, de cambiar a mamá y acostarla, se quedaban
un ratito hablando Lucia, Mireia y Juan.
Hablaban de todo,
a Lucia le gustaba comprometer a Juan con conversaciones con las que Juan se sentía incómodo.
(L) Juan, ¿cuándo
me vas a pedir la mano?
(J) Algún día.
(L) Juan, te
necesito, desde que te cruzaste en mi
camino, te ví tan diferente, que mi vida no la concibo sin tí.
(J) Sí, mi amor,
gracias, pero ya me tienes aquí contigo, no te quejes.
(L) Juan, te
quiero tener más cerca.
(J) ¿Aún más?
(L) Sí, mi cielo.
(J) Cariño, por
favor, contrólate.
(L) No puedo, por
más que lo intento, no puedo.
Lucia se levantó
del sillón y se sintió indispuesta, tuvo
una especie de mareo.
(J)¿Qué te pasa,
cariño?
(L) Me ha dado un
mareo, amor, y tengo angustia.
Juan cogió a
Lucía y llamó a Mireia para que fuera a ayudarla, llevarla a su habitación y
acostarla.
(J) Mireia, avisa
al médico, Lucia no se encuentra bien.
(L) No, cariño,
no llaméis a ningún sitio que esto no es nada, sólo es un mareo.
Lucia se empeñó
en que no llamaran y todos se fueron a dormir.
(Mi) Lucia
¿quieres que me quede contigo?
(L) No, gracias,
quédate tú, Juan.
(J) Está bien.
Juan pasó la noche
en la habitación de Lucia; él se sentó junto a la cama, pero Lucia no se lo
permitió.
(L) Juan, ven, acuéstate
aquí, a mi ladito, no sea que te enfries.
(J) Por dios,
Lucia.
(L) Mi amor, si
no vamos a hacer nada, no ves que no te dejas, tienes miedo.
Juan accedió a acostarse junto a Lucia y los dos
durmieron plácidamente, guardando las distancias.
Muy temprano,Juan
se fué a su habitación.
A la mañana siguiente,
se vieron todos en el desayuno y la mamá, preocupada, preguntó: ¿Qué te pasó, Lucia?
(L) Nada, mamá,
sólo ha sido un mareo.
CAPITULo
DECIMO cuarto (14)
Mireia y Juan se
cruzaron en la ducha.
(J) Hola, Mireia.
(Mi) ¿Cómo se
encuentra Lucia?
(J) No está bien,
desde el accidente no es la misma.
(Mi)¿Qué
accidente, Juan?
(J)¿No sabes nada?
(Mi) No.
Juan se lo contó
todo, lo del atraco, la violación y lo del médico.Y como se conocieron y lo que se quieren en el buen sentido de la
palabra ,respetándose, aunque la situación es cada vez más difícil porque Lucia
está muy enamorada . Pero, Juan, por su madre no quiere comprometerse del todo,
le da miedo enamorarse ciegamente.
A Mireia le gustó
la sinceridad de Juan con ella.
Juan consideraba
a Mireia una buena amiga, por el cariño que le tenía a Lucia.
Mireia era una
joven muy parecida a Lucia, una escultura y un físico muy atractivo, digno de
su profesión.
Mireia trataba
a la Sra. Juana
como si fuera su madre, también le decía mamá.
(Mi) Mamá, voy a
cambiarte y a ponerte guapa.
(M) Gracias,
Mireia, también eres muy buena.
Mientras Mireia estaba
cambiando a su madre, Juan entró en la
habitación.
(J) ¿Se puede?
(M) Adelante,
hijo, mira como se portan conmigo
(J) Sí, mamá, les
estoy muy agradecido a las dos, son como dos hijas.
Mireia le dice:
Sí, hermanito.
(A Juan le gustó
como Mireia le dijo hermanito, le hizo mucha gracia).
(A Lucia le
persistían los mareos, acompañados de vómitos).
Estos hechos
provocaron preocupación en Lucia, que comentaba con Mireia los malos presagios
que se avecinaban.
(L) Mireia, me
temo que estoy embarazada.
(Mi) No me digas¿del
violador?
(L) Sí.
(Mi)¿Qué vas a hacer
ahora?
(L) Pues, no sé, me
temo que tendré que abortar, hablaré con Juan.
(L) Mañana me haré
la prueba, para corroborar si es cierto.
En eso llegó
Juan.
(J)¿Cómo está la Sra. de la casa? (refiriéndose a Lucia).
(L) Cariño, tengo
que comentarte algo.
(J)¿Qué pasa
Lucia?
(L) Juan, me temo
lo peor.
(J) Dime, cariño,
que te ocurre.
(L) Juan, creo
que estoy en estado.
(J)No puede ser,
mi amor.
(L) Sí, Juan,
pero no tengo la dicha de que sea tuyo.
(J) No será de
quien me imagino,mi vida.
(L) Asi es,
Juan,no lo quiero tener,no lo quiero.
Juan, abrazándose
a Lucia,le dijo: Cariño, no digas eso,ese niño (a) no tiene la culpa de lo que
te hicieron,ese niño(a)nos tiene a nosotros, seremos unos buenos padres.
Lucia estaba muy
dolida, no quería a ese niño de ninguna manera,pero la insistencia de Juan le
quitó la idea de abortar .
(L) Juan, ¿por
qué lo has hecho?
(J) Lucia,te
quiero y no deseo que lo pases mal.
CAPITULo
DECIMO QUINTO (15)
(L) Ven,
Juan,abrázame, ¡cuánto te necesito! contigo se que todo va a ir bien.
(L) ¡Que ganas
tengo de tener un hijo tuyo!me muero, mi amor.
(J) Todo llegará.
(L) Se me está
haciendo muy largo,no ponemos nada por nuestra parte; bueno, yo lo intento,
pero tú siempre me dices lo mismo. (Miedo al Amor).
(J) Cariño, las
prisas no son buenas consejeras, estoy aquí, me tienes¿qué más quieres?
(L) Te lo digo o no
te lo digo.
(Lucia estaba
loca por Juan, le hubiera gustado que ese niño fuera de Juan.)
(L) (Me las tengo
que ingeniar para quedar embarazada de Juan lo antes posible.)
(Mi) Juan,¿puedo
hablar contigo un momento, porfavor.?
(J) Cómo
no,señorita: cuéntame.
(Mi)Juan,
necesito que me hagas un gran favor,es el primero que te pido y me gustaría
contar contigo.
(J) Dime, preciosa
¿de qué se trata? estoy a tus ordenes y no me puedo negar a lo que tú me pidas,
te debo muchos favores, nunca mejor dicho, por mi madre.
(Mi) Juan,lo que
te voy a pedir es muy atrevido.
(J) Mireia ¿qué
me vas a pedir mi mano?
(M) Casi,Juan,mira
tengo una gala(Fiesta) de trabajo y es necesario asistir con pareja, ha sido
todo muy precipitado y el primero que me vino a la mente eres tú.
(J) Pero,Mireia ,¿dónde
me quieres meter?
(M)Juan,cariño,
todo va a ser muy normal.
Juan estaba asustado
por lo que le acababa de pedir Mireia, pero algo le decía que tenía que
coresponderla , aunque no queria que Lucia se enterase.
(J) Mireia ¿para cuándo
es esa fiesta?
(Mi) Para el
sábado a las 21:00 h, hay que ir de smoking.
(J) No puedo
decirte que no, pero evitemos que se entere Lucia, creo que se podría molestar.
(Mi) No te
preocupes, no se enterará, ya lo areglaremos.
(J)¿Qué se te
ocurre?
(Mi) Saldré como
cada sábado, ¿y tú?
(J) Que tengo una
cena de trabajo, aunque esto no me gusta Mireia, déjame que me lo piense,
faltan cuatro días.
(Mi)Juan ¡por
favor!
(Juan no tenía
más remedio que aceptar el compromiso de Mireia, a pesar de no gustarle, no
quería defraudarla, su comportamiento, el trato con su madre obligaban a Juan
a complacerla)
A la mañana
siguiente:
(J) Vale, preciosa,
acepto tu invitación, pero ojo, ojito….
(Mi) Juan ¡qué
feliz me siento! Pienso que Lucia se alegraria si lo supiera.
(J) Yo creo que
no, no creo que seas una santita.
(Mi) Sí, ya lo
veras.
(J) Bueno, ya me
pondrás al corriente de la fiesta.
(Mi) ¿Tienes
smoking?
(J)Oye ¿no me querras
casar?
(Mi) Sí, conmigo,
tontito.
Mireia y Juan se
lo tomaron muy bien, bromeaban entre ellos y parecia que a Juan le empezaba a gustar la idea.
(Juan pasó a ver
a Lucia a su habitación)
CONTINUARA.......................................
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