2011/03/02

ECOS DEL ROCIO La obra de los Ecos: no hubiera sido posible sin haber conocido a José María González de Quevedo, para sus amigos: PADRE QUEVEDO. Gran rociero y gran conocedor por su vocación del lenguaje mariano. Aunque por encima de todo valoramos su disposición y su calidad humana.


LA OBRA DE LOS ECOS Puede que al leer este título en un principio todo el mundo entienda que nos estamos refiriendo al global de nuestra carrera. Para nosotros, esta que tienes en tus manos siempre será nuestra obra. Estamos con ella, como el que tiene 28 niños y le nace la primera niña.

Esta será nuestra obra, nuestra niña preferida, con la que haciendo honor a nuestro nombre, bendito nombre: (Ecos del Rocío) le daremos las gracias a la Blanca Paloma por cosas como la salud, la suerte en la carretera, el amor, por nuestro querido público y por todas esas grandes y pequeñas cosas cosas que ocurrieron a nuestro alrededor y que hicieron posibles nuestros grandes logros como pueden ser nuestras familias nuestros éxitos y una cosa muy importante, conocer y hacer nuevos amigos, manteniendo a nuestros amigos de siempre.


La obra de los Ecos: no hubiera sido posible sin haber conocido a José María González de Quevedo, para sus amigos: PADRE QUEVEDO. Gran rociero y gran conocedor por su vocación del lenguaje mariano. Aunque por encima de todo valoramos su disposición y su calidad humana.
 

El padre Quevedo fue capaz de mezclar sus conocimientos con un lenguaje elegante y castizo, fácil de musicar y siempre dejando muy claro que en lo sencillo está lo bonito. Gracias padre.

La obra de los Ecos es el resultado de varios proyectos en uno. Después del buen trabajo litúrgico del Padre Quevedo hicimos todo lo posible por mezclar la misa rociera con varios temas que enriquecieran algo que ya tenía un alto nivel de riqueza. Aunque la música de la obra era de Miguel, el grupo quería más y decidió que El Moyares escribiera varias piezas con la idea de conservar el aire de Ecos, al que estábamos acostumbrados nosotros y nuestros (para nosotros) sagrados seguidores. Para esto, tuvimos a bien tres cosas: La primera: crear unas sevillanas ilustrativas que te hicieran vivir cuatro grandes momentos del Rocío. Repartiendo sus 4 palos por toda la obra, con la firme idea de que el tiempo que esta durara, te envolviera de tal manera que te hiciera sentir la sensación de estar en el Rocío. Segunda: Queríamos hacer una cosa original, algo que quedara para los piques de cantes en las candelas entre hombres y mujeres, en esas noches del camino y creamos la nana del pastorcito, un tema al que dan vida Carmen de Las Carlotas y Paco de Ecos, en el que la Carmen representa a la Virgen intentando dormir a su niño antes del salto a la reja y Paco es el pastorcito que no se duerme porque quiere ver los caballos de la laguna. Enhorabuena a los dos. Tercera, y muy importante: Esta obra tenía que ser muy rociera gustarle mucho a ECOS DEL ROCÍO, a los rocieros, a los indiferentes y a los no rocieros.

Hemos utilizado el mismo banco de pruebas que Ecos utiliza siempre, un número inferior a 10 buenos aficionados, seguidores de Ecos y de otros artistas que nos ayudaron a señalar los temas en los 28 discos anteriores y nos dieron como nota un 16 que es el número de cortes que la obra tiene. Gracias a todos y al decir todos, permítannos una dedicatoria especial de esta obra: Al primero que escuchaba siempre todo lo que hacían los Ecos (como él nos llamaba) y que después de atravesar el infierno hace poco nos dejo y se fue a las marismas azules: va por Joaquín Casimiro. Gracias a Marta Quintero por su colaboración en dos de las oraciones de la obra el Aleluya y el Santo, gran compañera, gran artista y que gran persona. ¡gracias Marta!


También gracias al grupo Manguara por querer tanto a los Ecos y compartir con nosotros el Señor ten piedad. A nuestras niñas y queridas hermanas Las Carlotas, a José Manuel EL MANI al que adoramos y a todos los que aparecen en los créditos porque todos hicieron del sueño de Los Ecos su propio sueño ¡Os queremos a todos!. Un detalle En el intento de completar la obra de los Ecos, entendimos que una parte importante de una hermandad del Rocío era su pregón. Es por eso por lo que hemos incluido a modo de texto y al completo un pregón escrito por Miguel Moyares en que te haremos vivir todas y cada una de las sensaciones que vive un rociero desde que se pone la gorra hasta que vuelve a su casa y la cuelga en la alcayata. Cuatro años de trabajo: han hecho posible que esta obra pueda ser comprendida por cualquiera de cualquier parte del mundo, que jamas haya oído hablar del Rocío. Disfrútala con el mismo cariño con el que la creamos para ti.


FIRMA ECOS DEL ROCÍO  MIGUEL PACO JESÚS JUAN MANUEL

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